jueves, 19 de agosto de 2010

LA DANZA DE UN ANGEL

El despertar de una musa
que se desliza cautivante
y seductora por mis sueños,
reaviva este corazón
al sentir su velo bailar sobre mí…

Dulce encanto de latidos,
que uno a uno aparecen
y desaparecen,
dejando ese halo
de sutiles suspiros,
por tus movimientos
que acarician mi carne
hasta hacer temblar mi alma…

Encarnas el tiempo perpetuo,
ese instante de eternidad,
esa visión pausada,
que ahoga mi corazón
hasta las lágrimas…

Pero estás ahí…
a veces alegre
y señorial,
a veces trágica
y descarnada,
otras más
seductora
y excitante…

No tengo duda de tu eternidad,
tu imagen es un beso
para mis ojos
al borde de la pasión…

Eres como un sueño inatrapable,
de innombrables emociones,
porque me haces sentir todo…
trastocas el cielo como
una grácil
nube lunácea adornando
tiempos oscuros…

Estás ahí…
siempre luminosa,
tan presente
y eterna…

Cómo atraparte…
si nunca estás quieta…
te posas frente a mí
como mi inexorable amor…

Cómo atraparte,
sólo en mi corazón…

Cómo atraparte…
musa de ágiles
alas…

Cómo atraparte…
si te mueves como los ángeles…



No hay comentarios: